Marruecos, es una nación cuya religión principal es el islam y esto es lo que hace que se rijan por algunas leyes establecidas por esta. De manera que, en algunos lugares se sigue el proceso musulmán para el divorcio. El divorcio en Marruecos es un proceso que debe seguir ciertas normas y requerimientos.
¿Qué dice el islam sobre el divorcio?
En el islam, el matrimonio es una unión sagrada entre dos personas que, de mutuo acuerdo, deciden iniciar su vida juntos. Así que el divorcio no es considerado una práctica aceptada del todo por la religión.
Sin embargo, para ser este el caso puede resultar muy fácil divorciarse para el marido, quien solo debe decir las palabras mágicas: Talaq, o yo me divorcio de ti. Este le permite divorciarse casi por cualquier razón sin necesidad de acudir a ningún juzgado o corte religiosas.
Ahora en el caso de la mujer es distinto, ya que se regula mucho más su intención de divorcio, y solo puede hacerlo por contadas razones, como maltrato o abandono. Además, tiene que recurrir ante un juez religioso que puede negar su solicitud.
¿Dónde se solicita el divorcio en Marruecos?
A pesar de que la ley islámica establece el proceso de divorcio, en Marruecos se ha regulado un poco este proceso a fin de evitar abusos a la mujer. Primero que nada, se debe hacer una solicitud a un juez para que autorice que dos adules redacten un acta de divorcio.
Dicha solicitud debe introducirse en el juzgado de donde se origina la esposa, o donde se inscribió el matrimonio. Antes de autorizar el divorcio se debe realizar una última sesión con tentativa de reconciliación. Si no se realiza esta audiencia no se puede seguir con el proceso de divorcio.
¿Cuál es el proceso de divorcio musulmán?
En el islam se establece que tanto la mujer como el hombre pueden solicitar el divorcio, sin embargo, antes de hacerlo efectivo se debe esperar unos tres meses. Este tiempo tiene como fin lograr que las partes recapaciten y evitar el divorcio. Se pueden incluso valer de la mediación de terceros.
Sin embargo, el hombre puede divorciarse sin el consentimiento de la mujer y puede hacerlo por medios electrónicos e incluso sin que esta sepa. Así que no es raro ver llegar a mujeres después de un largo viaje y darse cuenta de que su esposo se ha divorciado.
Además, el hombre tiene la posibilidad de dar advertencias a su esposa por cualquier cosa que no le guste. Puede decir la palabra talaq por cada enojo, hasta que a la tercera puede ser la definitiva.
El proceso de divorcio musulmán está poco regulado en algunas partes del mundo, por lo que en ocasiones se ven injusticias contra la mujer.
